-
La alcachofa se caracteriza por ser un alimento hepatoprotector, es decir, ayuda al buen funcionamiento del hígado, gracias a una sustancia nombrada Cinarina que a la vez da soporte a la función biliar y, por tanto, la digestión de la grasa. Como consecuencia, disminuye los niveles de colesterol y además, es un hortaliza muy rica en fibra dietética que nos ayuda a combatir el restreñimiento. Además, su alto contenido en agua y potasio hace que sea ideal para incorporarla en las dietas de adelgazamiento. La crema la combinamos con semillas de chía, que son ricas en ácidos grasos omega 3, caracterizados por ser antiinflamatorios y por tener un alto poder saciante. Actualmente, la chía pertenece al grupo de los considerados súperalimentos por su densidad nutricional y poder terapéutico.
-
La zanahoria es un alimento muy rico en beta caroteno (vitamina A) que ayuda a mantener un buen estado de la piel y mocosas ya que tiene un papel clave en la diferenciación celular epitelial. También es conocida por su importante papel en el sistema inmunológico, interviene en la formación de anticuerpos y es un gran antioxidante. La crema la combinamos con jengibre, un alimento muy poderoso porque tiene infinitas propiedades medicinales entre las cuales podemos descartar su efecto carminativo (ayuda a la digestión), su poder antinflamatorio y antioxidante y el favorecimiento de la circulación. También contiene mandarina que es una fuente de vitamina C.
-
El calabacín, a parte de ser rico en potasio y por tanto muy diurético, se considera una hortaliza de muy fácil digestión. Esto lo convierte en uno de los pocos alimentos aptos para cuando hay problemas estomacales y/o digestivos. La crema la combinamos con comino y pimienta negra, dos especias con propiedades claramente digestivas. La semilla de comino ya era utilizada por los griegos como especia carminativa tras sus grandes banquetes. Al comino también se le otorgan propiedades hipoglucemiantes (mejora los niveles de azúcar en sangre) y nos ayuda a combatir estados de anemia ya que es muy rico en hierro.
-
El puerro es un tipo de vegetal muy sabroso que se caracteriza por su sabor ligeramente dulce y porque aporta varios beneficios al organismo. Son una de las mejores fuentes de fibra dietética, que ayudan a saciar el cuerpo. También son ricos en vitamina B9 y ácido fólico, que ayuda al cuerpo a generar nuevas células y mantiene la sangre sana para oxigenar el organismo. Es una fuente de calcio, de potasio y de Vitamina C. La crema la combinamos con miso, y eso hace que sea excelente para reforzar las defensas. El miso es un ingrediente de origen asiático que actúa como probiótico. Esto significa que estimula el sistema inmunitario ya que nos ayuda a generar la flora intestinal y nos hace de barrera protectora contra microrganismos patógenos. Es una crema ideal para mejorar nuestra flora bacteriana.
-
El apio-rábano hace que esta crema sea hipocalórica y diurética. Es muy adecuada para aquellas personas que quieren controlar su peso. La crema la combinamos con ajo negro, considerado un antibiótico natural, diez veces más poderoso que el ajo convencional, que fortalece el sistema inmunitario y nos ayuda a prevenir enfermedades cardiovasculares. Pero eso no es todo porque esta crema, además, está elaborada con nabo daikon, un alimento muy utilizado en la cocina japonesa, rico en vitamina C y con claras propiedades antiaging. Gracias a todos estos ingredientes la convierten en una crema con un alto poder antioxidante.
-
La combinación de los alimentós que forman esta crema, la convierten en una receta ideal para reforzar el sistema inmunológico. La calabaza contiene vitamina A, que tiene un papel clave en la regulación de nuestras defensas. La crema la combinamos con Xiitake. Un tipo de seta muy utilizado en la medicina tradicional japonesa por sus propiedades antioxidantes y reforzantes del sistema inmune, y las hierbas provenzales le dan un toque aromático a la vez que destacan por ser antioxidantes, digestivas y antinflamatorias.
